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Termina el largo día: Umberto D., de Vittorio De Sica
“Yo no dudaría en afirmar que el cine raramente ha ido tan lejos en la toma de conciencia del hecho ... -
No acepte imitaciones: El bazar de las sorpresas, de Ernst Lubitsch
Tres meses después de terminar el rodaje de Ninotchka (1939), Lubitsch empezó a filmar El bazar de las sorpresas (The ... -
Rostros en silenciosa elocuencia: Faces, de John Cassavetes
“El tiempo aquí es a la vez demasiado y escaso. No me dice nada. No sé nada. No conozco a ... -
La verdadera historia de Arizona Jim: El crimen del señor Lange, de Jean Renoir
“Renoir es el maestro de muchos de los más grandes: Rossellini, Bresson, Visconti, Truffaut, Rohmer, Straub, Antonioni, Buñuel; pero es ... -
Un baile de máscaras: El mayor y la menor, de Billy Wilder
«Así que hice una película comercial, lo más comercial que he hecho nunca. Una chica de veintiséis años que finge ... -
Los amantes condenados: El muelle de las brumas, de Marcel Carné
“Me siento más cercano a Carné que a Rossellini. Tú sabes, Carné no es un realista. Él transfigura la realidad ... -
Ven conmigo, tú fundirás campanas y yo pintaré íconos: Andrei Rublev, de Andréi Tarkovski
Ninguna otra película ha dado jamás una significancia mayor al papel del artista. Es como si la sola presencia de ... -
Receta contra el olvido: Amarcord, de Federico Fellini
“Nuestros sueños son nuestra vida real”. -Federico Fellini Es cualquiera de sus imágenes. Es el pavo real exponiendo su plumaje ... -
Será justicia: Testigo de cargo, de Billy Wilder
«Me aburro si hago siempre lo mismo. Admiro a Hitchcock; pero no podría trabajar como él, porque siempre hacía la ... -
Entre Marx y la Coca-Cola: Masculino, femenino, de Jean-Luc Godard.
“Los norteamericanos son buenos narradores. Los franceses no. Flaubert y Proust no pueden contar historias. Ellos hacen algo más. Así ... -
El sacrificio de los peones: La patrulla infernal, de Stanley Kubrick
“El alarde de la heráldica, la pompa del poder y todo el esplendor, toda la abundancia que da/ Espera igual ... -
La vida vana: Yo la conocía bien, de Antonio Pietrangeli
-“El hecho es que todo le va bien, siempre está contenta, no quiere nada, no envidia a nadie, no es ...
