-
Estrategias de depredación: Que el cielo la juzgue, de John M. Stahl
“Leave her to heaven / And to those thorns that in her bosom lodge / To prick and sting her.” ... -
Señales particulares: Vivir su vida, de Jean-Luc Godard
“Una de las obras de arte más extraordinarias, hermosas y originales que conozco” – Susan Sontag Dos o tres cosas ... -
Medio día y una noche entera: El matrimonio de María Braun, de Rainer Werner Fassbinder
Ante la ruina y la tragedia, volverse práctica. Olvidar el pasado, maquillarse, buscar los mejores ropajes, sacar partido de lo ... -
Pulsiones perversas: Bella de día, de Luis Buñuel
“No sé cómo explicártelo. Hay muchas cosas que ni yo misma entiendo. Cosas que me conciernen. Lo que siento por ... -
La vida en los Campos Elíseos: Un tranvía llamado deseo, de Elia Kazan
Ya no hierve la sangre, sólo el deseo. -Harold Alvarado Tenorio Un pequeño apartamento de dos habitaciones en el barrio ... -
Mutuamente cautivados: El silencio del mar, de Jean-Pierre Melville
“El silencio se prolongaba. Era cada vez más espeso, como la niebla de la mañana. Espeso e inmóvil.” -Vercors, El ... -
Asomados al abismo: Cabaret, de Bob Fosse
“Fosse estaba creando la mejor versión cinematográfica de un musical de Broadway de todos los tiempos, y a la vez ... -
Un avión rumbo a Argelia: Tarde de perros, de Sidney Lumet
“Empecé a sospechar que Andy Warhol y Paul Morrissey habían escenificado la operación completa como una parodia de mal gusto ... -
El imposible retorno a Manderley: Rebeca, de Alfred Hitchcock
“Anoche soñé que regresaba a Manderley”… nos dice la voz de la segunda esposa de Maxim de Winter. Nos habla ... -
La soledad del honesto: Ladrón de bicicletas, de Vittorio De Sica
« ¿Bicicleta? –replicó-, ¡pero si en Roma se roban de cuatrocientas a quinientas diarias!» -Luigi Bartolini, Ladrones de bicicletas 1. ... -
La vida soñada de un hombre casado: La comezón del séptimo año, de Billy Wilder
«Marilyn pensaba que el modo en que lucía le daba derecho a ciertos privilegios. Era verdad. Pero eso no funcionaba ... -
Azares imprecisos: Las señoritas de Rochefort, de Jacques Demy
“Me gustaría que la gente aceptara esta ligereza, pero que no la tomara a la ligera” -Jacques Demy Cuando Gene ...